Mi tía de 65 años, que es muy “Teresina”, pero a la vez está muy “informatizada” vino el otro día a comer y nos dijo: “¡Niños! ¡Qué página web más antigua que tenéis!” Nosotros le dijimos: “¿Cómo? ¡Nosotros estamos muy orgullosos de esta página web que nos ha acompañado tantos años!” Y ella nos dijo: “No, no. ¡Estáis equivocados! ¡Si vas con el ipad o el móvil, no la puedes abrir! Empieza a estar muy vieja y un poco casposa”.
Fuimos a consultar a nuestros amigos, parientes y conocidos, que están todo el día enganchados a internet y efectivamente corroboraron la opinión de la tía: La página web, sin darnos cuenta, había envejecido como nosotros. A pesar del cariño que le tenemos, la hemos tenido que substituir.
La nuestra vieja y querida página web antigua, la podéis encontrar enlazada a la nueva; y así poder mantenerla como reliquia, que es lo que es.
¡Aquí tenéis la nueva, acabada de salir del horno! ¡A ver que os parece! ¡Disfrutadla!